El Club Deportivo Bala Azul empató sin goles en la visita del Unión Molinense al Estadio Playasol Doctor Gironés. Los de David Cano fueron superiores durante todo el encuentro salvo algún tramo aislado de la segunda mitad pero no lograron materializar ninguna de la más de media docena de ocasiones claras de las que dispusieron.
Fue un partido marcado por dos estilos antagónicos. Mientras que el cuadro molinense realizaba largas y estériles posesiones en su zona defensiva, el Bala hacía daño en cada una de las transiciones, poniendo en serios aprietos a una zaga en la que un buen Junior y un reconvertido Jose Manuel trabajaron bien para intentar frenar la avalancha ofensiva del Bala.
Las ocasiones se empezaban a contar con centros laterales, cuyos remates se marchaban por poco hasta situaciones de uno contra uno que desbarataba un decisivo Hugo. Además, tras una buena combinación entre Isaac y Loren, el colegiado anuló un más que dudoso gol al lateral ilicitano.
Sin tiempo para más el árbitro mandó a los jugadores a vestuarios.
En la segunda mitad, el Molinense tuvo 5 minutos de frenesí asolando el área y provocando varias acciones que el colegiado no consideró punibles.
Tras la avalancha, todo volvió al guión inicial en el que el Molinense volvió a adueñarse del balón, pero el Bala seguía disponiendo de las más claras, está vez más aún que en la primera mitad con un larguero de Julien, otro cara a cara de Ferni que se marchó por poco, o varias incursiones de Andrés o Alejo que repelió Hugo.
Ya en el añadido, el colegiado anuló un tanto dudoso al cuadro molinense, lo que a la postre acabó ‘empañando’ un partido en el que el Bala Azul fue superior a una de las mejores escuadras del grupo XIII y que no se decidió por pequeños detalles.